Este recorrido le llevará desde el extremo sur de la Selva Negra hasta su mitad norte. Aquí hay algo para todos los gustos, incluso la autopista alemana para Eilheimkehrer.

¿Le gustan las carreteras abiertas y variadas, los paisajes embriagadores, los bosques oscuros, las posadas acogedoras y un paseo tranquilo por una pequeña ciudad al final de una exitosa jornada en bicicleta? Entonces esta excursión a la Selva Negra septentrional podría ser perfecta para usted: el destino del día es Freudenstadt, una pequeña ciudad fundada en 1599 con una población de unos 22.000 habitantes y un pintoresco centro que alberga la plaza del mercado más grande de Alemania. Sugerimos una ruta de unos 190 kilómetros, en su mayor parte por carreteras secundarias en buen estado que permiten avanzar rápidamente. El punto de partida es Waldshut, otra pequeña ciudad con un acogedor centro, ideal para reunirse y continuar el viaje. 

A lo largo del curso del río

Salimos enseguida por una carretera secundaria en dirección a Gurtweil, donde tras unos kilómetros llegamos al romántico y rocoso valle Schwarza-Schlücht, donde la carretera sigue el curso serpenteante del río. En Ühlingen-Birkendorf, subimos una pequeña colina antes de descender al siguiente valle acuífero. Desde Bonndorf, seguimos la B 315 durante un corto tramo antes de darnos el gusto de ir y venir por una sinuosa carretera secundaria que nos lleva muy cerca del desfiladero de Wutach.

A un nivel superior

Pusimos rumbo a Eisenbach, que se encuentra a 944 metros de altitud. En el punto de partida, directamente a orillas del Rin, aún estábamos a unos 360 metros de altitud, y en nuestro destino nos encontramos a unos 700 metros. Más o menos a mitad de camino, llegamos a la siguiente localidad turística, Triberg. La ciudad se encuentra en la Ruta Alemana de los Relojes, al igual que Schonach, que le sigue, y alberga los relojes de cuco más grandes del mundo. La ruta continúa por el Rohrhardsberg, donde merece la pena hacer una pausa en el restaurante Schwedenschanze (conocido popularmente como "Schänzle") con una cerveza fresca, vino de arándanos (sólo una degustación) o un suculento bocadillo campesino.

Etapa en moto de Bruno

El escenario motero de Bruno en Oberwolfach es una oportunidad ideal para una parada más o menos larga. En este pequeño museo (siga las señales), se escenifican de forma imaginativa y humorística algunas grandes exposiciones. Si no quiere estudiar cada moto en detalle, probablemente no necesitará más de diez minutos. Después, otros 40 kilómetros hasta Freudenstadt deleitarán a moteros y pilotos con el placer de las curvas, magníficos paisajes y fantásticas vistas. 

Por tierra o por autopista

Si no va a pernoctar en Freudenstadt y no quiere perderse el acogedor paseo por la ciudad, puede encontrar fácilmente en el mapa una buena ruta de vuelta a casa. Si vuelve a casa el mismo día, le recomendamos tomar la autopista A 81 (dirección Singen/Schaffhausen), que está a poco menos de 30 km, o la autopista A5 (dirección Basilea), que está a unos 55 km.