Triumph ha vendido 17.000 unidades de la Scrambler desde su lanzamiento en 2006. Once años después, se lanza al mercado la nueva versión basada en la Street Twin con el bicilíndrico de 900 cc con desplazamiento de las bielas de 270. El nuevo modelo no sólo lo hace todo mejor, mucho mejor de hecho, sino que también establece nuevos estándares en términos de valor en la clase media.

Que todavía puedo experimentar esto: Por aquel entonces, en 1979, mi Triumph T 140 Bonneville Special era un montón de acero horriblemente soldado con un motor aceitoso, cables colgando, carburadores babeantes, un depósito con fugas y silenciosos que ya estaban oxidados cuando eran nuevos. 38 años después, la nueva Street Scrambler del mismo fabricante es una de las motos más bonitas y de mayor calidad que he puesto bajo mi trasero, al menos en esta categoría de precio. Las superficies limpias, el aluminio cepillado, los cables perfectamente tendidos y los detalles cuidadosamente diseñados llaman la atención nada más mirarla. El radiador de agua está perfectamente disimulado, el catalizador del sistema de escape elevado es casi invisible entre el colector y el cilindro, y el asiento acolchado y extremadamente cómodo es un poema. La pantalla central redonda proporciona la información con calma y claridad, el manillar ancho es ergonómicamente ideal para su uso en ciudad, en carreteras comarcales y en terrenos ligeros fuera de carretera. Ambas manetas son ajustables a la longitud de los dedos, el pie izquierdo se desliza con precisión por la casi silenciosa caja de cambios de 5 velocidades, la altura del asiento de 792 mm no plantea problemas a nadie, los frenos muerden con firmeza y control, y del resto se encargan el control de tracción y el ABS (ambos desconectables).Fácil desde el taburete La Street Scrambler es ajena a cualquier comportamiento infantil de fanfarronería, sólo quiere ser una cosa: tu mejor amiga. Apenas hay un motor en el mercado que sea tan suave y fácil de acelerar como el 270 - motor bicilíndrico de 900 cm3 de cilindrada de la Street Twin. Sostenido y con mucho par motor, saca la carga de 223 kg de la curva con placer a partir de 1.800 rpm. Todas las velocidades relevantes de hoy en día se alcanzan sin esfuerzo, pero en un abrir y cerrar de ojos. El punto de cambio es siempre 4500 rpm, por encima del cual apenas hay nada de interés. 55 CV pueden ser decepcionantes sobre el papel, pero en realidad no falta ni un solo caballo. El chasis de construcción clásica está a la altura: los neumáticos estrechos y la rueda delantera de 19 pulgadas la hacen precisa y ligera de pies, mientras que la pipa de dirección plana con gran avance le quita todo el nerviosismo. La Triumph Street Scrambler es la moto perfecta para caballeros jóvenes y no tan jóvenes.