En red y vendidos

Big data en la industria del automóvil: un potencial de negocio de miles de millones y el fin del motociclismo tal y como lo conocemos.
El futuro del motociclismo está en las nubes, o más exactamente en la computación en nube: el tiempo, los atascos, la localización GPS, la radio por Internet... estamos constantemente conectados y ya estamos utilizando todo el potencial de la nube con la ayuda de aplicaciones, por ejemplo para planificar rápidamente una ruta o reservar una habitación de hotel mientras nos desplazamos. Y la continua digitalización de las propias motocicletas también está facilitando la conducción y aumentando significativamente la seguridad vial.
¿De dónde proceden estos grandes avances que estamos presenciando? Son esencialmente una consecuencia del hecho de que estamos experimentando el ritmo de innovación más rápido jamás visto en el sector de las tecnologías de la información: El plan de Bosch de permitir en breve la visualización y el uso de aplicaciones para teléfonos móviles de forma optimizada en las motocicletas también está relacionado con ello. En la TÖFF 08/17 se presentó el avanzado sistema de integración de smartphones "mySpin" del fabricante. "mySpin" es compatible con smartphones Android e iOS. Lo mejor es que las actuales pantallas Bosch de las motos enduro touring premium de KTM ya pueden mostrar información personalizada desde la nube en la pantalla del cockpit.
Minería de datosLos recopiladores de datos están en todas partes Integrar el smartphone en la moto es una idea tentadora, pero hay que preguntarse si esta comodidad añadida merece la pena. La preocupación por la extracción de datos, la piratería informática y los manillares transparentes también está de actualidad, pero los fabricantes y los medios de comunicación apenas la abordan. Un vistazo a la situación en los coches muestra hacia dónde se dirige el viaje en la construcción de motos: un coche moderno transmite actualmente hasta 3 GB/km. Constantemente se envían al fabricante extensos paquetes de datos, cuyo contenido no podemos imaginar qué quieren hacer con ellos los propios fabricantes: Desde la ubicación hasta las pistas de música escuchadas, pasando por la agenda del teléfono móvil... datos tan sensibles son enviados constantemente al fabricante por los coches modernos sin que éste se lo pida (punta de película: www.goo.gl/djcrxK). Pero es precisamente este frenesí recolector el que llena "las minas de oro del futuro". Porque los datos pueden venderse a terceros. Pero el mayor riesgo de piratería informática proviene también de las interfaces Bluetooth y de teléfono móvil necesarias para ello, como las que ahora utiliza "my- Spin" de Bosch para las motos.
¿El Gran Hermano en la cabina de la moto? De lo que casi nadie habla: La moto en red, el eCall, la protección antirrobo por GPS, pero también la aplicación de movilidad en el smartphone ofrecen infinitas oportunidades para infiltrarse en la vida del conductor. Los expertos en protección de datos ya advierten sobre el Gran Hermano en el salpicadero de la actual generación de coches. Por ejemplo, nunca ha sido tan fácil crear perfiles de movimiento precisos. "mySpin" lo demuestra: Después de los coches, las motos también se están convirtiendo en servidores de millones de datos en todo el mundo, que no sólo recopilan ingentes cantidades de datos sobre el vehículo, sino también sobre su conductor. Se generan miles de datos por cada vehículo, lo que naturalmente despierta deseos. ¿No le parece? ¿Aparca a menudo delante de McDonalds? Si los datos se transmiten a su compañía de seguros médicos en el futuro, podría enfrentarse a un aumento de la prima por un estilo de vida poco saludable. Apple ya ha ampliado su política de privacidad para permitir la transmisión de datos de movimiento a terceros. Al mejor postor, claro.
"No hay por qué preocuparse" es la respuesta de muchos usuarios ingenuos: "La cantidad de datos es demasiado grande", o "no tengo nada que ocultar" y "todo se ha anonimizado". Nada más lejos de la realidad: el campo de la inteligencia artificial avanza a pasos agigantados. En particular, está contribuyendo a la automatización de los análisis de big data. Y un estudio realizado por científicos de la Universidad belga de Lovaina ha desmentido hace tiempo el mito de los datos anónimos: Sólo cuatro de los datos de localización a los que acceden constantemente los proveedores de telefonía móvil bastan para identificar al 95% de las personas que se creen anónimas, ya que nuestros perfiles de movimiento son muy claros y característicos en la mayoría de los casos (ruta de casa, pub habitual, lugar de residencia y lugar de trabajo). Ergo: ¡ya estamos pagando con nuestros datos!
El fabricante de sistemas de navegación TomTom saltó a los titulares en 2011, Agencias de publicidad, comerciantes de datos, bancos, autoridades de tráfico... no faltan quienes quieren rentabilizar sus rastros de datos. El vehículo de dos ruedas está mutando lenta pero inexorablemente en un servidor itinerante en el que la sensación de libertad durante la conducción pronto podría ser engañosa. Pero no recopilar datos ya no es una opción. Lo único que queda por debatir es la forma en que usted personalmente (decisión de compra) o la forma en que el sector de la motocicleta debería abordarlo.
Extracto de la revista TÖFF 08/2017.Texto: Michael KutschkeEdición: Désirée Troxler