Continúan las penas de cárcel para "speeders

El Parlamento cede a la amenaza de referéndum y restablece en la Ley de Tráfico la pena mínima privativa de libertad para los conductores con exceso de velocidad.
Las infracciones por exceso de velocidad -definidas como límites de velocidad fijos- deben seguir castigándose con penas de al menos un año de cárcel. Después del Consejo Nacional, el Consejo de los Estados también ha dado marcha atrás para quitarle viento al inminente referéndum de "Roadcross".
Un pequeño margen de maniobra para los tribunales
No obstante, la medida de la Via sicura se suavizará ligeramente: la pena mínima de un año de cárcel podrá reducirse si el automovilista ha actuado "por motivos dignos" (por ejemplo, una urgencia médica) o si sigue siendo inocente. En el futuro, los jueces también podrán reducir el periodo mínimo de inhabilitación para conducir de dos años a un mínimo de doce meses.
En el verano de 2022, el Parlamento estuvo a punto de dejar de prescribir una pena mínima de prisión para los denominados conductores con exceso de velocidad. La amenaza de la organización de víctimas de accidentes de tráfico Roadcross de recoger firmas contra la Ley de Tráfico (SVG) modificada y bloquear así también las demás enmiendas hizo que se diera marcha atrás.
También incluye: carreras en circuito
El proyecto de ley volverá ahora al Consejo Nacional. Sin embargo, ya no hay diferencias de contenido entre las dos cámaras. Por tanto, la ley revisada tiene más posibilidades de convertirse en jurídicamente vinculante. Entre las novedades figuran la definición de las condiciones marco para la conducción autónoma, la exención de la obligación del casco para los ciclistas y la posibilidad de volver a permitir las carreras en circuito en Suiza, también para los vehículos con motor de combustión. Sin embargo, fracasaron en las negociaciones la propuesta de permitir aparcar los vehículos de dos ruedas en las aceras si hay espacio suficiente y la legalización de los avisos de control de tráfico.